En el antiguo Egipto, el perro fue incluso venerado, como en el caso del Dios Anubis.
Tanto los Mayas y los Aztecas, veneraban al perro.
FILANTROPÍA
Filantropía significa humanitarismo o altruismo, es un sentimiento (empatía) que hace que los individuos ayuden a otras personas de forma desinteresada, es amor incondicional, es decir, sin intereses, sin fines de lucro y sin requerir nada a cambio, hacia el ser humano. Es un término de origen griego, proviene de dos vocablos, φίλος (philos o filos), que significa amor, amante de, amigo de, y άνθρωπος (anthropos), que significa hombre, por tanto, filantropía significa amor a la humanidad o al género humano. La filantropía es la actitud de ayudar al prójimo, a los otros, el voluntariado o la acción social, dar caridad, ya sea a través de donaciones o donativos, como ropa, comida, dinero, etc. para solucionar los problemas de las personas. La caridad está estrechamente ligada a la filantropía. El concepto contrario a la filantropía es la misantropía (antipatía).
La filantropía sucede de varias maneras, a través de las donaciones a las ONGs (Organizaciones No Gubernamentales), a comunidades, a personas, o simplemente el hecho de trabajar para ayudar a otros, directa o indirectamente, pero no necesariamente estas últimas deben ser filántropos.
La filantropía está más relacionada con ser capaz de dar
algo, incluso sólo tiempo y atención, a otras personas o para causas
importantes, proyectos solidarios, solamente con el objetivo de sentirse bien,
y puede ser practicada en las iglesias, hospitales, escuelas, etc. Por
supuesto, es importante que la persona que va a ayudar tenga las herramientas
necesarias para ayudar positivamente a la otra persona, no basta sólo con
buenas intenciones, hace falta una buena preparación y a veces un buen equipo
de personas especialistas para conseguir ayudar a otros.
Hace unos años mantenía una amena conversación con una
señora. Después de estar conversando durante un tiempo, ella me preguntó: ¿ Y
puede saberse a qué se dedica Usted”? - Mi respuesta más inmediata y vista la
conversación que habíamos mantenido, me salió decirle: “Me dedico a la
filantropía”.
Su respuesta fue: “Que linda debe ser esa profesión, pero
realmente no sé a qué se debe dicha profesión”. Yo traté de explicárselo y ella
sintió vergüenza.
“No se avergüence usted Señora, se lo suplico. Todo viene a
colación de la conversación que hemos mantenido, y pensé que usted sabía de qué
se trataba. Perdone”. - Le dije.
Hoy vengo a tratar de explicar, que la Filantropía no es más
que el amor al prójimo. Hay muchas maneras de disfrazar ciertos términos, pero
al final no son más que lo que se demuestra hacer con acciones.
La RAE, explica que el término filantropía designa, en
general, el amor por la especie humana y a todo lo que a la humanidad respecta,
expresada en la ayuda desinteresada a los demás.
La filantropía comúnmente se superpone con la caridad,
aunque no toda caridad es filantropía, o viceversa. La diferencia comúnmente
citada es que la caridad alivia los problemas sociales, mientras que la
filantropía intenta resolver esos problemas definitivamente (la diferencia
entre dar un pescado a un hombre hambriento y enseñarle a pescar).
No cualquiera que se muestre generoso con una persona es un
filántropo. Uno puede donar alimentos a una O.N.G. (acto que se define como
“filántropo”), pero no ser un filántropo. En cambio una persona pobre que no
tenga nada que donar a los demás, puede sentir un impulso de amor al prójimo, y
cuando digo al “prójimo”, digo a toda la humanidad, ese puede ser perfectamente
un filántropo. La generosidad aunque ligada al benefactor del sentimiento
humano, no quiere decir que sienta “AMOR” por todos los humanos. La filantropía
va mucho más allá del factor generoso, es pasión, es amor al prójimo, es amar a
toda la humanidad.
Muchos hombres y mujeres, religiosos o no religiosos, se han
dedicado a la filantropía, algunos conocidos y muchos otros anónimos. La
filantropía es un término que se debería escribir en minúsculas para pasar a la
acción en MAYÚSCULAS.
Muchas ONG´s, Bancos y otras empresas, disfrazan su negocio
con el pretexto de ser filántropos, cuando sus intereses son otros. El concepto de la filantropía está muy
extendido hoy en día, y por error está asociado a las acciones de
responsabilidad social de las empresas (filantropía empresarial). La
filantropía está mucho más relacionada con el Tercer Sector, donde se hace algo
por la gente donde el gobierno no consigue llegar, más que a las empresas que
hacen acciones para contribuir a una sociedad mejor, más equitativa y justa,
porque también se puede interpretar solamente como un medio para hacer
marketing. Sin embargo, muchas veces los más humildes y los más pobres, son los
que más ofrecen a los demás. Tal vez porque saben lo que es estar necesitado.
Ahí crece y nace la filantropía.
El amor al prójimo tampoco significa que se deba dar sólo al desprotegido o desvalido.
Amor
al prójimo es sentir amor por todos los humanos.
Sin tener la imperiosa necesidad de relacionar las buenas acciones, el amor al prójimo, la caridad y la bondad con ninguna religión, ONG u otras empresas, el ser humano debe tener la obligación moral de ser filántropo por naturaleza, por el hecho de pertenecer a la especie humana.
Subrayo esta frase, porque de un tiempo para acá, vengo observando como subimos fotos y vídeos de animales mostrando su bondad, casi en un modo comparativo a la falta de valores humanos. También cómo la cantidad de personas que muestran su amor por los animales (que está muy bien). Pero sin dejar de amar también a su especie.
Cierto es que se fueron perdiendo muchos valores humanos, pero no hay
que generalizar. Por suerte aún hay gente muy caritativa, bondadosa y generosa
entre nosotros.
Tal vez los que colgamos esos vídeos y fotos mostrando la bondad de los animales, sea un reclamo a la humanidad y sus valores, todo esto me dio motivo para reflexionar y decidir que más que mostrar las imágenes, deberíamos dar el primer paso al cambio y obrar en consecuencia con hechos reales. No se precisa de mucho, a veces solo es cuestión de entrega, de compartir.
Alguien dijo:
"Estoy seguro de que invertir en los pobres trae recompensas. Es
tan excitante como cosechar éxitos en el ámbito de los negocios, y más
significativo”.
Me encantó esta frase también: "Los ríos no beben su propia
agua; los árboles no comen sus propios frutos. El sol no brilla para sí mismo;
y las flores no esparcen su fragancia para sí mismas.
Vivir para los otros es una regla de la naturaleza. (...)
La vida es buena cuando tú estás feliz; pero la vida es
mucho mejor cuando los otros son felices por causa tuya !"
Porque has de saber, que es mucho más dichoso el dar, que el
recibir.
Nuestra naturaleza es servicio:
"Quien no vive para servir, NO sirve para vivir"
(Una ley natural).
El amor al prójimo no conoce límites de ideológicos ni confesionales (Martin Niemoeller)
-Ricardo Mercado Sierra-
Nota: Este artículo no pretende hacer ningún tipo de apología política, sino simplemente aclarar algunos conceptos muchas veces confundidos...