EL KI

El Ki en japonés, Chi ó Qi en chino, es la energía o fuerza natural intangible que llena todo el universo.

Es la fuerza que da vida y movimiento a la vida. Todo y todos somos energía, vibrando a diferentes frecuencias.

Trataremos de explicar este fenómeno natural desde un plano científico y coherente. 

Más allá de supersticiones o creencias, está la ciencia. No se trata de creer o dejar de creer, se sabe que existe. La cuestión es cómo explicar su funcionamiento, por qué interactúa y cómo desarrollarlo.

Esta energía vital, es conocida en la ciencia y en todas las religiones. Muchos estilos y sistemas de artes marciales nos hablan de su existencia y ponen nombres a sus estilos con este término, ejemplo de ello lo encontramos en el "ai KI do", el propio "KI ai" es la liberación de esa energía; El "reiKI" es un sistema que dice hacer uso de KI. Estilos chinos como el "QI gōng", también hace referencia al KI o Qi.

Dicha energía vital, es conocida con múltiples nombres, así en Sánscrito Prana, en japonés Ki, en Chino Qi o en coreano Gi, sin mencionar los nombres que recibe en cada una de las religiones que son muchas.

¿Qué nos impide llegar a experimentar su funcionamiento con total eficacia?

El relacionarlo con lo místico, cuando se trata de algo más cercano a nosotros de lo que pensamos o creemos. Los prejuicios, el temor a lo desconocido, los tabús, pero sobre todo, la falta de paciencia.

 En artes marciales como en otras actividades, el sinónimo de KI se hace patente como por ejemplo en AI KI DO, KAP KI DO o el Rei KI.

El término KI, se refiere a la ENERGÍA. En este artículo iremos descubriendo varios tipos de energía existente en el ser humano, según la ciencia (actual), y pongo entre paréntesis la palabra “actual”, porque puede que mañana nazca otra ciencia que nos diga lo contrario o reafirme y muestre que esa tal energía se puede fotografiar.

 

Hay mucha controversia con el concepto del KI. Las mentes racionales muchas veces se niegan a aceptar que lo que no vemos también existe. Pero eso, sólo es ignorancia. Pese a tantas controversias y desajustes, desde que el hombre toma conciencia de sí mismo y su existencia como ser razonable, siempre ha estado ahí queriendo razonar y encontrar una respuesta a algo que se sabe existe pero difícilmente se puede demostrar. Unos lo llaman KI, otros QI o CHI, en psicología tal vez pueda ser el de FUERZA HISTÉRICA, o en parapsicología y otras ciencias puedan conocerlo por el sobrenombre de ENERGÍA VITAL o ENERGÍA CUÁNTICA. En la India se conoce por PRANA. Sea cual sea su denominación, está claro que todos hablamos de lo mismo. La cuestión es ¿existe verdaderamente?- Y ¿ Qué dice la ciencia ?

Desde hace miles de años, la filosofía Vedanta y la Medicina Tradicional China, nos hablan de cuerpos energéticos en el hombre y de estructuras energéticas en nuestro cuerpo, que actualmente la ciencia está demostrando que son reales. La ciencia vanguardista nos habla de que el universo es un mar de energía cuántica en el cual nosotros estamos inmersos y formamos parte de él. 

¿ Se trata pues de aprender a canalizar esa energía, controlarla y emplearla a capricho?

Lo iremos viendo....

Ahora conozcamos más datos sobre lo que nos dice la ciencia:

 

¿ qué tipo de energía es el kí? 

 

Hasta ahora, la ciencia clasifica la energía de la siguiente forma:

 

Tipos de energia:

Energía térmica: o calórica, se debe al movimiento de las partículas que constituyen la materia. Un cuerpo a baja temperatura tendrá menos energía térmica que otro que esté a mayor temperatura. 

 

Energía eléctrica: causada por el movimiento de las cargas eléctricas en el interior de los materiales conductores. Esta energía produce, fundamentalmente, tres efectos: luminoso, térmico y magnético.

 

Energía radiante: es la que poseen las ondas electromagnéticas como la luz visible, las ondas de radio, los rayos ultravioleta (UV), los rayos infrarrojo (IR), etc. La característica principal de esta energía es que se puede propagar en el vacío, sin necesidad de soporte material alguno.

 

Energía química: es la que se produce en las reacciones químicas. Una pila o una batería poseen este tipo de energía. Las transformaciones de energía en el cuerpo son también químicas.

 

Energía nuclear: es la energía almacenada en el núcleo de los átomos y que se libera en las reacciones nucleares de fisión y de fusión, ej.: la energía del uranio, que se manifiesta en los reactores nucleares. 

 

 

A estas podemos añadir energía mecánica (máquinas), potencial (posición) y cinética (movimiento), aunque como no nos sirven para el estudio no las analizaremos ¿Qué tipo de energía generan los seres vivos? Muy pocas en realidad: cinética, química, eléctrica y térmica...  según la teoría metafísica, el ki vendría siendo un tipo de “energía pura". 

 

Aceptando esta definición, convendríamos que el KI (energía pura metafísica) se convierte en otros tipos de energía al interactuar en el plano físico.

¿ Cómo entonces puede demostrar la ciencia de que esa energía existe a pesar de no haber una explicación posible?

Bien, la ciencia aún no puede explicar con certeza cómo funciona, pero sí puede demostrar que existe. Han tenido que pasar muchos años para que la ciencia se pronuncie a tal efecto y reconocer que algo inherente al ser humano existe como modo de energía vital. Puede que la ciencia denomine a este tipo de energía “FUERZA HISTÉRICA o FUERZA SOBRENATURAL”.

Un ejemplo:

No hace mucho, se dio a conocer en todos los medios, el accidente que sufrieron dos niños.

Se les calló un pesado mueble encima, uno de ellos, el mayor que solo contaba con 2 años de edad, sacó fuerzas de donde no las tenía para levantar el mueble y socorrer a su hermano.

Hablamos de dos niños no mayores de 2 años de edad, donde su conciencia aún no cabe el engaño, ni el falso protagonismo o el afán por engrandecer su ego. Simplemente actuó en consecuencia y una fuerza superior fue el verdadero protagonista de esta acción.

Otro caso es el de la madre que rescata a su hijo que se encontraba debajo de un coche, levantando el auto con sus propias manos y sacando de igual modo fuerzas de donde no las había. 

Otra madre logra levantar un tronco de 250 kilos para salvar a hijo, la madre logró salvar así a su hijo de que un árbol le aplastara la pierna. En efecto, la ciencia le da a esta acción el nombre de FUERZA HISTÉRICA. Para mi no es otra forma de definir el KI, el QI, CHI o PRANA.

Después de todo, Fuerza histérica también llamada Fuerza sobrehumana o super fuerza, es una manifestación de la fuerza extrema de los seres humanos, más allá de lo que se considera normal, sucediendo generalmente cuando alguien está en situaciones de vida o muerte, no muy distante y lejana de lo que conocemos por KI.

Lo cierto es que de vez en cuando, ese tipo de increíbles hazañas de "fuerza histérica" o llámese como una quiera, parecen ocurrir realmente.

En todo caso, los científicos tienen un entendimiento incierto de lo que podría haber detrás de esos episodios y hasta la fecha no encuentran explicación, pero saben que haberlo hay lo.

Vamos a llamarle entre nosotros y coloquialmente FUERZA INTERIOR.

Por otra parte existe la creencia popular de que en momentos de gran necesidad una fuerza interior, escondida la mayor parte del tiempo, sale a flote. Los seres humanos somos capaces de cosas increíbles. ¿Es la fuerza histérica una de dichas proezas? Antes de nada, entendamos cómo funciona la fuerza muscular. Los seres humanos poseemos, básicamente, dos tipos de músculo: el estriado y el liso. Grosso modo, estos dos se diferencian en la capacidad de contraerse de forma voluntaria o no. El músculo estriado es aquel que movemos a voluntad. El liso lo hace de forma involuntaria y se encarga de que nuestro cuerpo funcione. La única excepción a esto es el músculo cardíaco, que es estriado e involuntario. El músculo estriado se llama así por cómo se ve al microscopio. Esto se debe a cómo están formadas las fibras que lo componen. 

Cuentan las leyendas urbanas que en momentos de necesidad, una persona es capaz de levantar un coche a pulso. ¿Pero de verdad existe eso que llaman fuerza histérica? ¿Y de dónde proviene? - Para poder dar una respuesta a esta interrogante, yo diría que es la fuerza del mismísimo KI.

Lydia Angyio se encontraba frente al centro juvenil de Ivujivik, en Quebec, Canadá, viendo a su hijo de siete años jugar junto a sus amigos cuando un movimiento repentino captó su atención. En un instante, una enorme bola blanca llena de dientes y garras negras saltó de entre los árboles contra los niños, las presas más fáciles. La madre no se lo pensó dos veces y se lanzó a golpear al oso polar gritando. Probablemente fueron los minutos más largos de su vida. Y para suerte de los niños, la madre consiguió contener al oso el tiempo suficiente para que un hombre descerrajara cuatro disparos con su calibre .303 sobre la bestia. La madre resultó herida. Pero, extrañamente, sólo de forma leve. Y según contó en su momento la prensa, en 2006, no sólo la suerte tuvo algo que ver. También una fuerza y una voluntad sobrehumana acompañó a la fiera madre a la hora de proteger a los pequeños. ¿Es esta una demostración de que existe una fuerza sobrehumana que nos llega cuando más lo necesitamos? Esto es lo que sabemos sobre la fuerza histérica.

¿Podíamos decir que la fuerza interior o fuerza histérica es el KI? - Si bien puede ser que sean distintas fuerzas, actuan por igual.

La fuerza interior

Existe la creencia popular de que en momentos de gran necesidad una fuerza interior, escondida la mayor parte del tiempo, sale a flote. Los seres humanos somos capaces de cosas increíbles. ¿Es la fuerza histérica una de dichas proezas? Antes de nada, entendamos cómo funciona la fuerza muscular. Los seres humanos poseemos, básicamente, dos tipos de músculo: el estriado y el liso. Grosso modo, estos dos se diferencian en la capacidad de contraerse de forma voluntaria o no. El músculo estriado es aquel que movemos a voluntad. El liso lo hace de forma involuntaria y se encarga de que nuestro cuerpo funcione. La única excepción a esto es el músculo cardíaco, que es estriado e involuntario. El músculo estriado se llama así por cómo se ve al microscopio. Esto se debe a cómo están formadas las fibras que lo componen.

Básicamente, el músculo está compuesto por células hiperespecializadas que forman fibras muy fuertes. Estas fibras tienen la capacidad de acortarse, es decir, contraerse, cuando se estimulan gracias a los nervios, que producen una señal eléctrica. Esta es traducida a una señal celular. Al contraerse cada fibra, se contrae todo el conjunto hasta acortar el músculo por completo. Esto ocurre rspidísimamente gracias a que la señal es a nivel molecular (en concreto, iónica, lo que se traduce de nuevo en una respuesta eléctrica). Y todo lo que ocurre a este nivel es muy rápido. Otra cuestión importante es el nivel de fuerza que se produce, que obedece exclusivamente al número de fibras que participan en la contracción. Cuantas más fibras se contraen a la vez, más fuerza se produce. Y las hay por millones. Así podemos realizar movimientos tan precisos, suaves o fuertes, a elección.

Según los estudios, se estima que una persona normal es capaz de aprovechar hasta el 60% de su capacidad muscular. Los atletas profesionales serían capaces de aprovechar hasta un 80% de la misma. ¿Eso quiere decir que realmente existe una fuerza escondida? No. No confundamos capacidad muscular con fuerza. En primer lugar, por suerte, es imposible contraer todas las fibras musculares de nuestro cuerpo a la vez (lo que podría traducirse en la máxima fuerza ejercida). Esto, por ejemplo, ocurre en enfermedades como el tétanos. Debido a una neurotoxina (generada por la muerte de Clostridium tetani), las fibras se contraen por completo y sin control, provocando un dolor terrible, rasgando el tejido que tenemos y provocando la parada de nuestros órganos. Por suerte eso no es lo que pasa en la supuesta fuerza histérica.

¿Existe la fuerza histérica o KI?

Se han recogido decenas de casos a lo largo de la historia como el de Angyio: en un momento de gravedad, una persona es capaz de realizar una proeza tal como levantar un coche a pulso. ¿Acaso son mentira? Tampoco. Pero tengamos en cuenta varias cuestiones. La primera es que Zydruna Savickas ostenta el récord de levantamiento de peso muerto con 523,8 Kilos, algo más de media tonelada. Pero claro, levantar un coche supone tres veces más, ¿no? No tiene por qué. Y es que gracias a la ley de la palanca, levantar un coche apoyado sobre sus ruedas no implica levantar su peso muerto. Si Savickas levanta 500 Kilos, sabemos que otros seres humanos pueden elevar centenas también.

Pero claro, Savickas es un atleta de élite, considerado como, posiblemente, el hombre más fuerte del mundo. ¿Cómo puede una persona sin entrenamiento llegar a un levantamiento tan enorme? La cuestión, según apuntan algunos investigadores, estaría en la adrenalina. Existen varios estudios que explican cómo un aumento de este mensajero hormonal es capaz de producir un mayor número de contracciones de las fibras musculares. Los músculos tienen varios sistemas de defensa para evitar daños. La adrenalina, en cierto sentido, ayudaría a "forzar" dichos sistemas para poder conseguir más fuerza práctica. Sin embargo, dichos estudios están rodeados de polémica. Si bien es cierto que sabemos a ciencia cierta que existen otras sustancias relacionadas con la adrenalina capaces de generar episodios de fuerza extrema, las dudas vienen por una cuestión muy sencilla: la adrenalina no sería capaz de llegar al músculo lo suficientemente rápido como para generar este aumento sobrehumano de fuerza. La diferencia entre la señal nerviosa y la señal hormonal es, a nivel de nuestro cuerpo, enorme en tiempo.

Es verdaderamente difícil estudiar si somos capaces de sacar más fuerza de la que tenemos en momentos de crisis ya que no se puede hacer un experimento que amenace de muerte a alguien. Desde luego, existen evidencias de que hay sustancias capaces de ayudarnos a generar más contracciones en el tiempo necesario para que se traduzca en fuerza. Pero no existe ninguna evidencia de que esto ocurra de manera natural en un momento de necesidad. A todo esto se une el misticismo de los sucesos que los seres humanos solemos aportar. ¿Existe entonces lo que se conoce como fuerza histérica o no? La respuesta es que... no lo sabemos. Probablemente la mezcla entre la situación, la tensión, el resultado y, sí, algo de fisiología, generen ese efecto casi mágico, siempre épico, que nos empeñamos en llamar fuerza sobrehumana.

Si seguimos con el concepto de la energía, sea cual sea su nombre en los distintos campos, hemos de admitir que cualquier movimiento está previsto y ejerce y desarrolla su propia energía, sea esta cuando pensamos, soñamos o nos movemos. Si para llenarse de esta energía llamémosle ENERGÍA CÓSMICA, ENERGÍA VITAL etc. y que ejerza sobre nosotros un estado positivo, hay que vaciar primero lo negativo que podamos llevar dentro. Es un constante de vaciar y llenar de energía. Así mismo se manifiesta el propio KI AI.

En efecto, la propia palabra KIAI lleva implícito el nombre del KI, es decir, ENERGÍA.

Aunque la misma palabra KIAI, pueda sonar en sí misma como un grito, solo se trata del nombre. Su denominación o etimología, la palabra "kiai" se compone de Ki (気), que significa energía, y Ai (合), que significa unión. Lo que nos viene a decir que es la unión de la energía. Al gritar desde el centro del bajo abdomen, liberamos esa energía concentrada para dar más potencia al golpe o al impulso.

Muchos incluso, más que concentrar esa energía, lo que hacen es vaciarse de ella, ya que oigo con demasiada frecuencia que sueltan el grito (kiai), demasiado a la ligera. El Kiai debe ir concentrado, acumulando energía y no se debe dar con la frecuencia que muchas veces se da. Solo cuando sea preciso, en el momento preciso. Todo lo demás, es solo respiración, que tampoco deja de ser lo adecuado, en según qué momento y situación.

Los orientales (China, Japón, Corea etc), ya vienen desde siglos estudiando este factor y han hecho de ello una ciencia como el Reiki, la acupuntura, Shiatsu etc. Cosa muy distinta es que en occidente no se le de el valor que ellos les dan en el campo científico. 

Sin embargo la Bioenergética en el campo científico occidental, ya se está dando a conocer sus fundamentos y dicen que todo organismo viviente, especialmente el ser humano, capta y emite una energía que puede aprovechar en beneficio propio, solo es cuestión de aprender a canalizar a voluntad esa energía. Un avance tal vez tangible de la ciencia para explicar la existencia de tales energías en el ser humano, sea el descubrimiento de la a célula humana que se encuentra rodeada y llena de energía que la sostiene, la propia célula es la expresión tangible en el nivel atómico, su energía se encuentra dentro y alrededor del cuerpo. Por estos días se la puede fotografiar por el sistema KIRLIAN, este maravilloso avance nos permite ver e identificar sus diminutos centros. Esta energía es como una gran burbuja que rodea al cuerpo humano a la que se denomina de varias formas (aura, el huevo cósmico de la vida, biocampo, entre otros). 

Filósofos como Sócrates ya nos hablaba de esa energía existente en el ser humano y todo lo viviente y en todas las culturas antiguas si bien lo denominaban de otro modo por antonomasia, este hecho se daba por igual en todas las civilizaciones habidas y por haber. No es nada nuevo, de hecho, muchas tribus indígenas llevan practicando el curanderismo desde hace milenios a través de su chamán que canaliza esta energía para curar y sanar.  

En muchos casos cuando se me ha preguntado por el KI y para los más excéntricos, se me ha ocurrido la idea de decirles que el viento tampoco se puede ver, pero sabemos que existe cuando nos azota fuertemente. Es como la propia conciencia, que no la vemos, pero sabemos que existe cuando nos premia por nuestros actos o nos castiga por ellos.

La inmensa mayoría de practicantes de Reiki admite que lo que hacen es canalizar hacia sus clientes/pacientes una “energía espiritual que viene de más allá de ellos mismos”, no creen que sea una habilidad psíquica propia, por lo que la controversia continúa y la ciencia sigue sin encontrar explicación posible.

Lo peor de todo, es cuando se quiere dar un enfoque equivocado o presumir que se domina y se exagera su fuerza o su poder. Internet se inunda de vídeos de personajes haciendo un mal uso de lo que ellos llamar el poder del KI, que más que poder, es un engaño por no decir un fraude, y lo que sí queda claro, es la falta de respeto hacia los demás y hacia el mundo marcial y sus practicantes.

Pero el KI, existe!